Cuatro procesos para adoptar un esquema gig en nuestra empresa
La llamada gig economy o economía gig se refiere a la suma de las labores realizadas en esquemas de subcontratación o a través de aplicaciones terceras, generalmente temporales o por proyecto, y realizadas por trabajadores independientes.
Con los cambios en la sociedad actual — la tecnología, la globalización, el recambio generacional y hasta la pandemia del coronavirus — estos esquemas comienzan a tomar fuerza al grado de que, según reportes, algunas organizaciones como Procter & Gamble, Fedex y Verizon ya subcontratan entre 25 y 50 por ciento de su fuerza laboral.
Si consideramos que la Generación Z ocupará más de un tercio de la población en edad de trabajar a inicios de la década y que además la mayoría de los millennials prefiere emprender de manera independiente, estamos ante una transición clara en nuestra idea de trabajo.
¿Qué hacer para preparar el terreno y adoptar estos esquemas en nuestras empresas? Exploremos algunos puntos.
Administración del talento
Probablemente sean mas comunes estructuras mixtas con una base de talento de planta que cree y mantenga el valor de las organizaciones y una subcontratación de fuerza laboral que opere e inyecte dinamismo desde el exterior.
Esto, sin duda, requerirá recalibrar los presupuestos y modificar la proporción de nómina y proveeduría de servicios.
Más allá de eso, el reto radica en la contratación e integración del capital humano a las organizaciones.
Más allá de eso, el reto radica en la contratación e integración del capital humano a las organizaciones.
Con herramientas como LinkedIn o Fiverr podemos encontrar perfiles muy específicos, pero ¿cómo crear entre ellos una afiliación y un sentido de pertenencia? Para esto conviene tener listos productos de onboarding en la empresa y reuniones de introducción con el resto del equipo de trabajo.
Entorno flexible
Teniendo la flexibilidad como eje rector en este esquema, las métricas son distintas a las de ambientes laborales tradicionales.
Dado que los trabajadores independientes se asemejan más a emprendedores terceros que a empleados de nómina, esto conlleva una dinámica distinta en la forma de dirigirlos y supervisarlos. Los horarios y las formas específicas de trabajo dejan de importar para dar paso a los resultados y los tiempos de entrega.
Nuevos procesos
Naturalmente, a formas de trabajo alternativas corresponden herramientas distintas. Dadas las dinámicas de la subcontratación y la distancia, es imprescindible instalar una serie de mecanismos que faciliten una interacción armónica y sin fricciones entre las partes.
La base de esta organización se integra por el diseño de contratos temporales, acuerdos de confidencialidad y órdenes de trabajo que dejen bien claros los términos y los alcances de las relaciones laborales, así como las repercusiones en caso de incumplimiento; asimismo, para los pagos, instalar procesos de facturación y transferencias electrónicas simples; y para asegurar la calidad de los servicios recibidos, formatos de evaluación de los profesionales subcontratados.
Base de herramientas
Ya con estos pilares, ahora sí se pueden atender los procesos de trabajo específicos. Para esto sirve adquirir licencias de distintos programas y servicios en la nube para facilitar los procesos: para la colaboración se pueden utilizar herramientas como Dropbox, Google Drive y Slack; para la administración de proyectos, Monday y Basecamp; para la comunicación en reuniones y videoconferencias, Zoom y Microsoft Teams, por mencionar algunos ejemplos actuales.
Eso sí: si la relación laboral inicia a través de una aplicación (como Fiverr), es importante mantenerla dentro de su marco y respetar sus reglas de uso.
Todas las soluciones implican retos. Aunque esta tendencia hacia la economía gig tiene beneficios claros como la flexibilidad y el ahorro, también presenta desafíos como la atracción y enfoque del talento hacia los objetivos.
Las empresas deben entender esta nueva normalidad y adoptarla en la medida de sus necesidades. Esto significa buscar un balance adecuado de empleados de planta y trabajadores independientes que aporten en sinergia lo mejor de ambos mundos.